El Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) ha revolucionado múltiples industrias, incluyendo la seguridad vial. Dispositivos tales como las balizas, han sido tradicionalmente herramientas pasivas, destinadas a señalar o advertir de peligros en la carretera. Sin embargo, con la integración del IoT, estas herramientas han evolucionado hacia sistemas inteligentes que no solo comunican su presencia, sino que también interactúan con su entorno y proporcionan datos valiosos para mejorar la seguridad y la eficiencia en las carreteras.  

 

Tecnología del IoT en balizas.  

El Internet de las cosas se refiere a la interconexión de dispositivos a través de internet, permitiendo que estos recojan, intercambien y actúen sobre datos. En el contexto del balizamiento, el IoT habilita la creación de un ecosistema de dispositivos inteligentes que pueden comunicarse entre sí y con una infraestructura centralizada.  

Algunos componentes clave son los siguientes:  

 

Sensores y Actuadores: Los dispositivos de balizamiento IoT están equipados con sensores que monitorizan diversas condiciones ambientales como la luz, temperatura y movimiento. Los actuadores permiten que el dispositivo responda a estos datos, como por ejemplo en algunos casos, ajustando la intensidad de la luz de la baliza. 

Conectividad: La conectividad es esencial para el IoT. Los dispositivos de balizamiento utilizan tecnologías como Wi-Fi, Bluetooth, y redes de comunicación móvil para transmitir datos en tiempo real a un sistema central o a otros dispositivos. De hecho, las balizas que se utilizarán de forma obligatoria en territorio español a partir del 1 de enero de 2026 están conectadas y mandarán datos a la DGT 3.0.     

Procesamiento de Datos: La capacidad de procesar datos localmente en el dispositivo (edge computing) o de enviarlos a una nube para su análisis permite una respuesta rápida y efectiva frente a las condiciones cambiantes en la carretera. 

Interfaz de Usuario: Las aplicaciones móviles y plataformas web permiten a los operadores monitorizar y controlar los dispositivos de balizamiento de manera remota, mejorando la gestión y la toma de decisiones.  

 

Seguridad, un componente clave.  

El funcionamiento de los dispositivos de balizamiento IoT se basa en la recopilación y análisis de datos en tiempo real. Por ejemplo, una baliza equipada con sensores puede detectar cuando la visibilidad es baja debido a la niebla y ajustar su luminosidad automáticamente para garantizar que los conductores la vean con claridad. Al mismo tiempo, estos datos pueden ser enviados a un centro de control, alertando a las autoridades sobre las condiciones peligrosas y permitiendo una respuesta coordinada. 

Según datos de la DGT, 1.145 personas fallecieron en siniestros de tráfico en carreteras españolas durante el año 2023, así pues, todos los esfuerzos por reducir los siniestros y prevenir a los conductores en carreteras, son bienvenidos.  

 

Datos en tiempo real.

Una de las contribuciones más importantes del IoT a la seguridad vial es la recopilación de datos en tiempo real. Los sensores de IoT instalados en carreteras y vehículos proporcionan información esencial sobre los patrones de tráfico, las condiciones de las carreteras y el rendimiento de los vehículos. Estos datos no sólo ayudan a mejorar la seguridad vial, sino que también guían los procesos de toma de decisiones para una mejor planificación del transporte y desarrollo de infraestructuras. 

Además, estos datos proporcionan una visión integral de la situación en las carreteras, lo que puede ayudar a identificar áreas de riesgo y lugares propensos a accidentes para tomar medidas proactivas. Por ejemplo, si los datos muestran que una intersección particular tiene una alta incidencia de accidentes, las autoridades pueden instalar dispositivos de control de tráfico adicionales o modificar el trazado de la carretera para reducir el riesgo de más accidentes. 

 

IoT revoluciona la seguridad vial. 

El Internet de las Cosas (IoT) ha tenido un impacto increíble en términos de seguridad vial en todo el mundo y de varias maneras significativas. Para muestra de su impacto estos 3 ejemplos más allá de las balizas.  

Carreteras inteligentes: Gracias a estas tecnologías hoy en día existen carreteras equipadas con sensores IoT que pueden ajustar los límites de velocidad según el tráfico y las condiciones climáticas. Esto, sin duda, es importante sobre todo en temporadas de lluvia o nevadas. 

Semáforos inteligentes: Los semáforos que cambian dinámicamente en función del flujo de tráfico en tiempo real para minimizar los atascos y reducir las posibilidades de accidentes en las intersecciones son hoy en día una tecnología muy usada en las grandes arterias de diversas ciudades del mundo.  

Sistemas avanzados de ayuda a la conducción (ADAS):Los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor, más conocidos como ADAS (Advanced Driver Assistance Systems) son sistemas automáticos que actúan con distinto rango de autonomía respecto al conductor y son capaces de intervenir en diversos sistemas de nuestros vehículos: freno/acelerador, dirección, señalización, etc. e incluso llegan a detectar el estado de alerta del propio conductor e identificar la señalización vial, entre otras muchas capacidades. 

Los ADAS son obligatorios desde julio de 2022 en España. Todos los coches de nueva homologación deben incorporar estos sistemas de ayuda al conductor.  

En general, la seguridad vial es un componente fundamental de la IoT y contribuye significativamente a la reducción de las tasas de accidentes y a la mejora de la gestión del tráfico.